martes, 3 de noviembre de 2015

Recordar

Puedo sentir como todo es como es, que por todas partes todos piensan, les observo y me doy cuenta que nada a cambiado desde hace mucho tiempo. Las personas maduran, algunas de una manera y otras de otra, pero sigue siendo igual.
Yo soy el primero, el que siempre se ha considerado un duro, pero es débil de corazón, independiente pero necesitado de tantas cosas que un corazón necesita, que a veces se me olvidan. Como siempre miro el humo nadar sobre la atmósfera de mi habitación, sigo su recorrido hasta que se esparce, extendiéndose entre el oxígeno y demás moléculas que se suponen que están ahí, pero no vemos. Sigo intentando explicar cada detalle, hasta lo más ínfimo, utilizando palabras jodidamente repelentes con un toque sarcástico que al final sólo yo entiendo. Tengo mil cosas pendientes de hacer, decir, vivir, sentir, llorar y reír, entre otros tantos sentimientos. A veces se me olvida quien soy, y suele ser lo de siempre, la Luna. Es Ella quien me recuerda por qué estoy aquí, por qué luchar y por qué seguir donde sigo.
Hay cosas destinadas a no cambiar y hay otras que deben cambiar para seguir su destino.
Recordar quien fuiste es recordar quien eres, no dejarte escapar de ti mismo. Estoy un tanto cansado de un mundo que se miente a si mismo y, más aún,  de un mundo que se sincera ante sí mismo y no hace absolutamente nada para cumplir lo que se autoconfiesa.
Vivimos en una contradicción continua, donde hacemos lo que sea por mantener contento a miles, cientos o una persona y nunca entramos nosotros entre ellas, cuando se supone que lo que vivimos es nuestra vida, y la vivimos para complacer a los demás, debería ser que nuestra propia escalada hacia la felicidad hiciera sentirse bien a miles, cientos o una persona.
Al final nada cambia y todo sigue igual, todos tienen demasiado miedo, y yo el primero. Sólo deseo no convertirme en aquel muchacho de aquella historia que escapaba de todo lo bueno que se le ofrecía por miedo, ese que, alguna vez dijeron, probablemente con certeza, que era yo.

jueves, 22 de octubre de 2015

Luna de octubre

Como siempre, el tiempo viene a recordarnos quienes somos, si fuimos grandes o pequeños, pringados o populares, optimistas o pesimistas. Desde siempre el temporal de octubre me recuerda lo mismo, a la Luna, la que me hablabas, la que inventamos aquellos años de niño, la que queríamos hacer nuestro mundo, nuestra ilusión, y se quedó en arena y aire que se deslizó entre nuestros dedos y la gran distancia que había entre ellos.
Me resultó tan difícil salir de ello, olvidar lo que no puedes y darte cuenta que necesitas asimilarlo, vivir con todos los errores y las consecuencias que traen consigo, la confianza que se pierde, la gente que se va, o simplemente poder decir "adiós".
Con el tiempo perderé la cuenta de los años que van, que se me podrá olvidar con la edad pero te hice decenas de fotografías y formé el cuadro de tus sonrisas, tonterías, tus historias; en definitiva, de ti, y jamás podré olvidarte a ti y que tú y los accidentes me han enseñado a vivir.
Por último decir adiós otro año más y, por supuesto, gracias. Gracias por ser mi necesidad ilógica dentro de mí mundo racional, todos creemos en algo que no se puede demostrar a pesar de que sepamos que no es real, pero nos hace sentir bien, y para mí, sigues siendo tú, que te convertiste en mi luna de octubre, que siempre me vigila.

"Solté el cigarro con una muesca de desprecio en el cenicero, sin cuidado, mezclándose con la ceniza, me quede mirando a aquella botella mientras sonaba aquella canción típica de la cual hay miles de copias en otros estilos casi iguales.
Mientras me fijaba en el bamboleo del líquido en la botella no podía de parar de pensar en ti, si estarías orgullosa, si estarías contenta, si me solucionaría tu simple presencia o una palabra tuya mis problemas.
Seguí mirando la botella cuando me quedé dormido, con un trozo ya infumable de cigarro y la botella a medias, tirado en el sofá y contento de dormir sin pensar en nada.
En mi tranquilo reposo algo me despertó y sentí que algo me acarició el pelo. Cuando pude abrir los ojos juré ver tu pañuelo esfumarse por la ventana, tu pelo corto y el brillo del piercing de tu labio... juré verlo y salí a buscarte, lo único que conseguí fue chocarme con la bicicleta, y una sensación extraña. Dicen que la locura es una enfermedad, pero bendita sea si me hace tener esa sensación.
Sacar algo positivo fue siempre mi especialidad y mi mente me jugó aquel día una buena pasada, me recordó como eras y que siempre estarás cuidándome de mis malas noches.
Locura? Es sólo un chute de sensaciones que te provoca alucionaciones, cada uno que se las administre como quiera y las analice como desee."
Gracias A.

lunes, 8 de junio de 2015

Al final estoy donde debería estar, soy feliz y no tengo ningún problema en admitirlo, en buscar los caprichos que puede ofrecerme un universo que no tiene nada que esconderme.
Todos acabamos donde debemos, y quizás sea aquí o en otro lugar con más o menos gente, con una orquesta clásica o con psicofonias extrañas sacadas de cualquier película de terror, pero piense lo que piense, todo es feliz, todo es algo bueno y por fin puedo dejar de sonreír para empezar a reír. Porque hasta las canciones tristes tienen un punto optimista, y no se cuantos químicos estarán rondando por mi cabeza, pero he descubierto que la droga más efectiva contra el dolor es la felicidad, y aunque es difícil pillarla, es la más efectiva

viernes, 5 de junio de 2015

Temprano

Desde siempre viviendo de recuerdos, por todo y nada, por seguir o aguantar o sobrevivir. Harto de malvivir del cuento, de dar pasos en falso y de más. Los recuerdos pueden atormentar cualquier alma, y a la vez pueden revivir cualquier cadáver que se hayan agotado sus ganas de vivir.
A día de hoy agradezco los recuerdos, desde aquel último día que arranqué de tus ojos un pequeño haz de luz, para partirlo, para inyectar pequeñas dosis de felicidad cuando más y menos lo necesito. Sobrevivir hoy es insuficiente, necesito más de todo y volverme un gran adicto a los sueños, no seguir por un camino y verlos todos, no reír por gracia y hacerlo por alegría.
He dejado un rastro de esos trozos de luz que te quito, para saber el camino de vuelta siempe. Para no olvidarme de que la felicidad tiene nombre, y que esto y deseando arrancar cada segundo de existencia que pueda. No quiero olvidarte aunque ello suponga la locura.

miércoles, 29 de abril de 2015

Que tal?

Y tu, que tal? Yo bien y tal, como siempre, tampoco cambia mucho la vida he aprendido el valor de lo que no está,  cosa que me parece que siempre aprendo y tengo más que asumida, pero el silencio es la más dura de las condenas que nadie puede soportar, el saber que estuviste ahí, para y conmigo, luchando en esto que llaman vida.
Cuantos años hace ya? Casi ni me acuerdo cuando te contaba mis paranoias de fantasma del mundo, esas chorradas que caen de mi mente y salen por mi boca casi sin pensarlo y sin miedos de vergüenza ninguna. Estupideces que echo de menos, no por no poder hacerlas, que sigo siendo casi igual, sino porque no estás tu para reírte con un cretino sin sentido como yo.
Que si, que es evidente,  que te extrañó, e intentar volver para atrás se me hace ya imposible, y por mucho que lo intente me va a dar igual, no vas a volver y aunque me lo niegue casi cada día, no estás para agarrarme del pecho con esas miradas inocentes que van a hacer todo el daño del mundo a mis temores.
Me quede en aquel portal, intentando escapar sin llave del veneno que me inyecto cada día recordándote, mirando al cielo como tantas otras veces, anhelando que al bajar la mirada estés por ahí, para contarte mi vida otra vez como antes, ojalá,  como si no hubiese pasado nada.
Es triste pensar que nadie conseguirá arrancar de mi estas noches, estos pensamientos de querer irme de todo este mundo y empezar de cero en mil lugares diferentes, de olvidarme de ti de una vez por todas, sacarte de mi pecho, de mi cabeza, de mis venas, arterias y capilares que se que llevan parte de ti.
Mi cerebro estalla por segundos, cada instante es mi lucha por seguir hacia delante y nadie logrará romper el muro que separa todo lo que la nostalgia me brinda... Si pudiera desear algo sería volver a estar un rato contigo, rondando la parte antigua, descansar en el Príncipe y gritarte a susurros lo que tantos años llevo callandome, que sin ti nada ha sido como me hubiera gustado que fuese.
Pero bueno, todo va bien, quizá mi futuro sea incierto, pero seguir adelante sin poder decirte que los días de lluvia cobran sentido por ti, por aquel día que queda en mi cerebro,  revienta mi interior y colapsa mi psique. Mi futuro sabiendo que no estás ni estarás ayuda, aunque sigo engañandome con lo mismo, a pesar de este futuro perfecto entre mis investigaciones utópicas y realización laboral, sigo deseando llamarte y decirte: que tal?
Preocuparse por una cosa quiere decir que lo demás va bien, espero que sea eso y mi mente no me juegue otro mal paso, que de cada tres bien, uno tropiezo.




miércoles, 8 de abril de 2015

todo

Diez frases que pueden decir mucho o nada, cuando todo acabó en nada, todo volvió a salir, con miedo, entre las sombras de un pasado que no quería saber nada de un futuro ni siquiera corto plazo, todo salió asustado buscando entre las sombras una sonrisa, todo dejó pronto de buscar, decidió ser feliz, encontrar en la vulgaridad un poco de sonrisa, y encontró libertad, hasta que todo descubrió que nada es incompatible y todo sonrió, y libertad le acompañó y forjaron entre el humo de la intimidad un mundo que creían conocer, pero desconocido. Quizás siguen sin saber que es lo que en aquel momento el herrero del destino les fabricó, pero la felicidad salió sola entre todo y libertad, y al final, sin nombres, sin nada más que el presente sintieron que jamás debía volverse a encontrar la nada con ellos y seguir disfrutando de la sonrisa. Al final diez frases no dicen nada de todo

domingo, 5 de abril de 2015

Invierno

Hoy me han dicho que si había escrito algo, y yo he contestado que lo tengo un poco dejado. Creo que es un buen momento para escribir algo y dejar mi opinión sobre el invierno, pero no el invierno de estación sino los microinviernos que pasan alrededor de nuestros días.
Sé que me repito y hablo siempre del tema autosuperación pero hoy voy a intentar hacerlo más poético y menos imperativo de lo habitual.
Mírame, hazlo solo por un momento, déjame aclarar las dudas de tu mente, tus sinfines de caídas al abismo, tus interminables caminos por los pasillos oscuros de tus incertidumbres. Déjame hacerte recaer otra vez hacia el otro lado, hacia el lado que no estás tan acostumbrado a ver, el lado donde las cosas tienen luz, y no están inmersas en aquel mar donde tantas y tantas veces te ahogaste y aún sigues sin saber cómo entraste y de qué forma saliste.
Deja que te ayude a caminar, sabes que daría todo lo que este mundo es para que todos fueran felices, mi vida no atrae ningún mal y agradezco el poder decirlo y disfrutarlo, por ello quiero eliminar el veneno que la sociedad ha inyectado en todos y cada uno de los capilares de tu cuerpo, que te han corrompido la sonrisa hasta olvidar cómo hacerlo.
Déjame que intente hacerte ver el mundo desde mis ojos, para que sepas cuanto brilla una sonrisa sincera, y lo que merece la pena luchar por ello. Se que es lúgubre el sendero que tienes que pasar, se que dan miedo los monstruos, los espectros del pasado, las ánimas del futuro que hay a través de él, escondidos entre los árboles de la esperanza, pero merece la pena seguir el camino por la misma razón que merece la pena vivir; porque nunca sabes que vas a encontrarte, a veces no sabes si merece la pena, porque es tan incierto que a veces no quieres saber el futuro. Por favor ten curiosidad, porque la curiosidad mantiene vivo el corazón más negro, la curiosidad por el qué vendrá, que romperá tu rutina, que te hará sonreír mañana, o ahora mismo.
Es complicado explicar el sentido de la vida, a mi me mueve la curiosidad, la curiosidad por leer un libro que nadie, nunca, va a poder vislumbrar el "qué pasará después" ni puede romper tu incertidumbre. Solo tú, siguiendo hacia delante en los días normales, los buenos y los malos puedes descubrir qué pasará.
Quizás sea yo quien acompañe algún fragmento de tu vida hasta el final, o quizás hoy leas esto con la sonrisa que mañana te hará llorar, pero solo siguiendo adelante y luchando por tu propio corazón, ese que te grita por un megáfono que quiere vivir y cumplir los sueños que parecen imposibles, ese que estoy intentando despertar yo, porque hay días que no quiere salir de la cama y acaba por dormir todo el día y tu olvidas tus deseos.
La realidad es el enemigo más fuerte que existe cuando luchas por ser feliz.

"Roto, roto y derrumbado mi pecho se abalanza hacia la desgracia y gracias a ti pude darme cuenta que luchar por sonreír merece la pena y mirar al cielo y mostrarle los colmillos aunque llueva... Esa sensación tan extraña, adictiva y cara que llaman ser feliz"

martes, 24 de marzo de 2015

Perdiendo el norte

Siempre cansados, siempre lo mismo de siempre, persiguiendo un modelo prefabricado de lo que una "buena vida" ha de ser, gritos ahogados entre los sueños que, por miedo, nunca llegaron a soñarse.
La vida es algo más que todo eso, la vida es disfrutar, es intentar conseguir por todos los medios aquel imposible que nos deja tirados y con la autoestima por los suelos. Lograr levantarse y seguir persiguiendo lo que realmente deseamos, sin pensar en a quien no le parece correcto, el ideal de realidad que queremos, enamorarse de algo hasta el punto de no tener que expresar el amor que idealizamos, y que a todos les parezca tan raro el seguir con ello a pesar de que para tu corazón le parezca tan normal como respirar.
La vida se basa en locuras, y la mayoría de las que he hecho han sido lo mejor de mi vida. La locura de enamorarse de nada y para ti todo, de gritar por reír y de llorar por volar, de estar sin estar y de luchar, siempre luchar por los sueños y seguir adelante con los prólogos de tus sueños, para que cuando el primer capítulo comience sea el mejor libro de tu historia, que las mejores historias son las que tienen una buena historia para explicar como llegaste hasta ahí.
Las locuras me mueven y mueven mi felicidad, cuando me digan que porque hago lo que hago quiero que sepan que es porque me hace feliz, y por eso digo que los locos, los zumbados, los paranoicos y los raros son ellos, por no hacer las locuras que te hacen feliz.
Está noche brindo por los sueños, por tus locuras y las mías, por nunca volver a encontrar el norte.

"Encontré esperanza en desesperar esperando, encontré luz entre las cuatro paredes sin ventanas de mi mundo, encontré fugacidad en lo estático y paz en la guerra, encontré encanto en cantar, en la música. La vida es difícil pero nunca nos quitan la voz para cantar, cuando cantar es necesario".

miércoles, 18 de marzo de 2015

lo de siempre

Al final, lo de siempre, un cigarro, un poco de música y mi mente empieza a divagar por todos lados a partir de las 00:00.
Me pare a pensar un momento en los problemas, en creer no ser capaz, en ese bajón de autoestima que nos da el pensar que no podemos hacer algo, esa paranoia mental que nos incita a cambiar nuestros sueños imposibles por algo más real, por algo que nos hacen ver posible y "bueno" para nosotros.
Hay que ponerse siempre los sueños como retos imposibles para, sí te quedas a medio camino, al menos conseguir algo de ese sueño, un pequeño recuerdo que nos impida olvidar quiénes somos. Que los retos que la vida nos ofrece no son para que nos achantemos y nos sentemos a ver como pasa todo, están para esforzarnos por conseguirlos luchar por todo siempre y mantener orgullosos a quienes nos apoyaron por el camino, y lo más importante y que está por encima de eso, sentirnos orgullosos de nosotros mismos.
Decir que no podemos hacer lo que sea es sólo una maldita falta de confianza, el fallar no es más que una forma de motivación, de seguir intentándolo.
Todo esto es difícil pero si me hubiese rendido en muchas de las situaciones que me he visto metido, no estaría donde estoy, las excusas son para los que no creen que todo puede ser perfecto, y si mi sueño es que toda mi vida sea perfecta, voy a luchar por ello, porque, al final, me quedaré a medio camino,  pero conseguiré por él tantas cosas que habrá más que merecido la pena.

"Soñar es para ilusos, me dijeron, idealizar es para idiotas me contaban, llorar es para débiles y luchar por imposibles para gilipollas, relataban mientras reían los que no sabían que sólo los soñadores cambiaron el mundo, y no el mundo entero, sino tu propio mundo, ese que rompe los cristales de los canones impuesto por la sociedad que nos cañonea con estupideces inútiles.
Cada reto de tu vida es un paso importante, por muy pequeño que te parezca, te hará crecer. Hazme el favor de luchar por tus sueños, y cuando caigas en el desánimo, avisame, estaré para aguantar lo que sea hasta que vuelvan las fuerzas para seguir adelante".

jueves, 12 de marzo de 2015

trozos de metal

Hay veces que no salen palabras bonitas, ni indirectas super filosóficas que sólo yo entiendo, días sin inspiración que te dejan en la estacada, tu y tus pensamientos sentados a la par, sin saber que decir, como una conversación de ascensor, sin entender la situación y forzandote a ti mismo a seguir algo que no sabes si quieres seguir.
A pesar de todo eso, de mentirte a ti mismo, de seguir sin fuerzas, sin aclarar tu vida después de mil buenos consejos que decidiste no seguir, a pesar de todo eso y de más, tienes que intentar abstraer tu mente de todos esos sinsentidos que te hacen sentirte mal, lograr evadirte de aquello que te revienta por dentro es una de las cosas más difíciles que puede haber, pero siempre habrá alguien a quien no le sea nada pesada la carga que te has auto-otorgado, que te recogerá a pesar de que no quieras recuperarte, que tus manos no sean más que parte de las suyas.
Y en ese momento puedes darte cuenta de lo que tienes delante, de encontrar a una persona que, en cualquier aspecto, sea importante para ti.
La vida está llena de sinsentidos, pero desde siempre nos han hecho ver que mil cosas buenas valen menos que la mitad de una decepción, y en realidad son las ironías sin pies ni cabeza las que te hacen estar y ser como tu quieras, que en ti hay algo más que entrañas y malos recuerdos, cuando quieras verlos, quizás mi meta haya acabado, y ya no sea necesaria mi presencia para hacerte ver lo bueno de todo, o puede que seas tu quien me hará ver que hay detrás de mí, pero seguiré luchando siempre, y ser un simple mercenario que se vende al mejor postor que pueda pagarle con la mejor de todas las sonrisas.

"Me cansé, de buscar aquí, de enredar en un arcon tratando de leer mi pasado entre cuatro folios maltrechos que llaman recuerdos. Y lo tiré todo, lo mandé a la mierda por no poder ya ni respirar del peso de cuatro folios, y en mi arrebato de ira se fue todo, y mientras, sudando en medio de aquél sotano, con no sé cuantos papeles volando, oí el metal contra la madera y busqué, y encontré el recuerdo que me hacía falta, un recipiente vacío, una caja por llenar, un nuevo recuerdo con el que vivir nuevas experiencias y guardarlas en el, dejar de rebuscar en mi pasado para complacerme y comenzar a rellenar el presente en aquel objeto. Encontré un trozo de metal, del tamaño de poco más que mi dedo pulgar, encontré un ancla, detenerme en el tiempo, y observar que de bueno hay en todo, y quedarme, sólo un ratito de eternidad sentado en aquel mar de arena".

viernes, 6 de marzo de 2015

Nada

No quiero nada ni nadie que quiera parecerse a mi, que quiera deformar su manera de existir lo más mínimo para complacer el mínimo detalle estúpido, quiero aprender de las dos mil millones de diferencias que nos hacen únicos, discutir sobre lo que es mejor y peor, luchar por nuestros ideales a la par que nuestro cerebro conecta lo que puede estar mejor en nuestra vida, lo que podemos cambiar para ser mejor, si empezamos a querer hacer bien las cosas dejando pasar que quizás podrían hacerse de otra manera, igual, mejor o peor, nos estancamos en una rutina que nos deja igual que cuando empezó, y la realidad es que cada segundo estamos cambiando y lo de siempre nos aburre.
A veces por inconsciencia actuamos complaciente al resto del personal por evitar problemas, y yo el primero, y por lo mismo tuve que tomarme en serio está lección, que nada ni nadie va a ser exactamente igual que nosotros, sólo hay que encontrar a quien nos haga sentir bien, y aprender de los detalles que ni son iguales ni deben serlo, que la magia está en ese hecho, y que nadie ha sobrevivido sólo a la rutina, quitando aparte las locuras, las inconsciencias que rompen un segundo de nuestra vida para inyectar un poco de adrenalina a nuestro ser. Sólo los que han aprendido sin tener ni idea de vivir, han sido auténticos genios.

"Y mientras miro en el autobús, la ventana me ofrece una visión de lo rápido que pasa todo. Pararse a descansar es necesario y no para coger fuerzas, sino para observar el mundo y darte cuenta de que la mierda de ayer hoy es solamente una piedra del tamaño de una uña, que al final, como el aire desgasta una montaña, el buen tiempo ha desgastado tus depresiones, transformándolas en un obstáculo mínimo en el camino a tu felicidad"

miércoles, 4 de marzo de 2015

por qué

Hoy es corto, solamente preguntar por qué,  por qué a todo, a lo bueno y a lo malo, a lo ilogico a lo lógico, a lo establecido y a lo antisistema. Por qué a las lágrimas, a la risa, a las decepciones y a las alegrías, por que a ti, a mi o a cualquiera. Por que a tanto y a tan poco, por qué no dejar se racionalizar, por qué no instinto...
El primer instinto humano es ser feliz, así que la peor pregunta es por qué no ser feliz, y dejar de preguntarse tanto

martes, 3 de marzo de 2015

Ánimo

Todos tenemos esos momentos de bajón emocional, todos los entendemos y nos identificamos con esas canciones tristes que tanto me gustan. Todo eso es un poco una mierda, los momentos de bajón son algo que necesitamos para vivir, que nuestro cerebro necesita interpretar para no volverte un huraño paranoico típico se las películas americanas. El secreto es intentar por todos los medios sonreír, que un día gris sea gris no es cosa de las nubes, es cosa de tus ideas, de despejar la mente e intentar encontrar donde encontrar una sonrisa, en el café de media tarde que hace un dibujo raro, en la profesora que se equivoca en pronunciar, en el chiste malo del día. Todo eso son señales de que tienes que animarte, a fin de cuentas siempre hay que sonreír, nunca sabes a quien le puedes hacer sonreír tu con la tuya.
Así que animo, el simple hecho de que alguien aleatorio haya escrito una parrafada de 5 minutos para que te sientas identificado tiene que ser algo, que sin mierda no sabríamos que es la paz, pero hay que encontrar perspectiva que si nos ponemos a darle vueltas, si, todo es una gran bola de mierda, pero todo es mirarlo desde otro ángulo y darte cuenta de que, a pesar de todo lo malo, merece más la pena vivir por lo bueno a cachos que lo malo de por vida.
Así que ánimo, que la sonrisa salga sola. Animo

"Que sea cuando todo pare, cuando mi corazón sea ceniza y mi voz no vibre, ese el momento que deje de reirme, y que pase mucho tiempo, que la risa sea mutua y que no haya que llorar más de lo necesario"

lunes, 2 de marzo de 2015

Egoísta felicidad

Otra vez a lo de siempre, mis canciones para escribir, mis pensamientos dando vueltas por la habitación, fusionados por el humo no me dan ninguna idea para escribir nada, la inspiración me dice que pase del tema y mi corazón me insta a que lo intente.
Al final todo funciona de esa manera, el intentar seguir hacia delante. La vida es eso, intentar arrastrar nuestros sueños hasta el final, mientras que mil voces te dicen de fondo que busques otra historia que sea más rentable. Aquellos que no valoran los sueños no sabrán que es vivir.
Hablando de la vida, es rara, te hace darte cuenta en media fracción de segundo de que es lo que es importante y lo que no, pero esa milésima ocurre cuando ya has tomado una decisión de lo que era importante. Aprender a ver el detalle, una mínima grieta que te aporta luz, es lo difícil, darte cuenta que lo que estas viviendo vale para siempre o para nada.
Valorar el momento y vivirlo sin tener en cuenta el futuro, es más importante de lo que parece, valorar a quien tienes cerca al máximo, exprimir cada segundo en divertirse, en ser feliz con quien tienes alrededor es la única manera de entrever que, si alguna vez le pasa algo habremos aprovechado el tiempo, y quizás eso me consuele a mi en particular. Mucha gente acaba alejándose de la vida de cada uno, o quizás seamos nosotros los que, en algún momento, nos alejemos de todo.
Quizás me pase media vida echando de menos a quien no está, o quizás mi mente se centre en estar feliz y sin miedos. Todo esto sólo depende de una cosa, tan simple como seguir hacia delante, encontrar aquella persona que te hace olvidar la nostalgia, o aquello que te abre el camino de tus sueños encontrar ambas cosas es difícil, aunque siempre habrá gente apoyándote en tu ida hacia ninguna parte, te darán apices de felicidad que jamás olvidaras. Al final buscamos algo o alguien que nos llene sobremanera mientras digerimos el paso del tiempo con otros para no acabar más locos de los que estamos.
El humano es egoísta por naturaleza al final, pero al final todo eso se va a la mierda, total, sólo buscamos ser felices y mientras vas acercándote a eso, procura que tu vida merezca la pena tanto como para que tus sueños nunca te frenen y haya siempre alguien a tu lado para nunca olvidar que tu felicidad, es parte también de la suya

"Deja, déjala que sonría, hacia tiempo que no la veía asi. Hacía tiempo que la Luna no se lavaba los dientes y se veía tan bien cono para sonreír".

domingo, 22 de febrero de 2015

Guerras de Paz

Entre el humo de la habitación se dibuja una sonrisa, está vez no está mal hecha, no es culpa del miedo, es real, una sonrisa que los cigarrillos no tapan. Estoy cansado de la guerra, del corazón y la cabeza, de la sociedad contra las personas del poder y el querer, estoy cansado de quejarme y de decir que el mundo es una mierda.
Quiero guerras de paz, quiero ver fuego entre la tranquilidad de nuestro campo de batalla particular, romper las leyes del mundo con cada palabra dicha en voz baja entre la calma que nos da la oscuridad, quiero poesía dicha con los dedos, quiero cantar en voz baja, quiero música en el silencio, quiero saber sin que se diga, quiero enamorarme sin que lo sepa.
No quiero perderme nada, entrar en la jungla del cielo, tocar sus puertas, no verte llorar, quiero música, quiero la vida, seguro que sienta bien todo eso, respirar hondo poner esa canción y olvidarme que es mejor o peor, si estoy haciendo mal o bien, si hay más o menos. Quiero que nuestra paz entre en guerra y que ese momento sea único y que en mi piel se formen carreteras, que las ciactrices se vayan de una puta vez, que no vuelvan nunca, que deje de repetirme, que la nocturnidad deje de afectarme que la alevosía de los besos lleven a buen puerto, que el agua sea el desierto de los ojos, y que la arena de tus pupilas me obligue a enterrarme allí, y encontrar paz, y que en ella disfrutemos de nuestra particular batalla y vuelva el humo a dejarse ver por la ventana y te deje entre ver. Que no vuelva a repetirme. Reinventar el sentimiento por la música, sólo para dos.

"Cansado de vivir encontré energía para salir adelante, curioso que fuera en el mismo baúl donde no quise mirar pensando "es inutil", curioso."

viernes, 13 de febrero de 2015

Suerte

No puedo evitarlo, demasiado coincidir, demasiado café, toda la vida esperando desesperar por lo que sea, rulando entre los rincones del mundo, deambulando entre las calles de que ser y hasta las narices de filosofía y de palabras que casi nadie entiende.
Los pasos de la vida, Dios, el karma, la suerte, el destino, cansados de cualquier placebo que nos permita vivir una día más con un mínimo de esperanza, nos pusimos a buscar la suerte entre lo mismo de siempre, amigos y cervezas, y al final encontrarse por casualidad con algo diferente que se convierte en café, música, en lo que quieras que sea, en paz, en guerra, en roto o en descosido, al final la sorpresa de la suerte aparece, sólo si sales a buscarla tendrás oportunidad de encontrarla

jueves, 12 de febrero de 2015

Con nocturnidad y alevosía

Entre los desvaríos de la nocturnidad y la alevosía de querer hacerlo, me puede la inquietud de preguntarme sobre todo, sobre qué pasará y lo que está pasando, se que todo va bien, que mi vida sigue dando vueltas de campana y alguna que otra vez caigo de pie, no sé hasta que punto tengo superado mis traumas y mis errores, si soy capaz de seguir adelante o de simplemente no caerme estando de pie.
Todo lo que pasa por nuestra vida acaba dejando marcas en la piel, que cuando las acaricias o las acarician siguen doliendo, pero algunas veces existe la fortuna de que alguien importante para ti traiga algo para aliviar el dolor, te hace seguir adelante entendiendo tu dolor y comprendiendo la paciencia de la cura.
La fragilidad de los buenos momentos es tal, que a veces una simple mirada puede cambiarlo todo. La vulnerabilidad de nuestra mente nos hace plantearnos mil cosas a cada situación, pensar en todo y en todos y ser el centro de nuestro propio mundo, todo para que al final nuestra situación se base en la misma historia de siempre, acaba resultando que lo que de verdad somos en el interior se abre paso y eso de pensar en todo, eso de ser el centro, eso del dolor, se esfuma por media milésima de segundo y sólo queda la fragilidad y la vulnerabilidad de saber si puedes hacerlo, y en ese momento hay que estar preparado, para sujetarse fuerte a los cimientos de lo que somos, no perder el norte y si tienes suerte poder tener a alguien que te arrastre a favor de tu voluntad hacia lo que tenías ya olvidado en el cajón de tus entrañas. Espero estar preparado en ese momento.

"La vida no es más que cuatro tonterías escritas a mano por un mal bromista que busca reírse inocentemente de nosotros, sólo en el momento que seas capaz de aliviar el rencor de las bromas y empieces a reírte del sentido del humor del destino, conseguirás seguir hacia delante y, simplemente, vivir"

martes, 10 de febrero de 2015

Único

Lo sorprendente de la vida no son las sorpresas, son las ilusiones, esos pequeños apices de vida que rellenan los huecos vacíos que fueron dejando los baches de la vida, esas ilusiones son las que, al final, regulan nuestra felicidad, fracciones de segundo donde todo parece distinto,  donde nos olvidamos de todo nuestro bagaje y podemos por un segundo volar.
Esas fracciones son las que deberíamos recordar, estamos demasiado acostumbrados a valorar más un error que mil detalles, no nos acordamos de lo bueno y el rencor no se olvida, esas fracciones de ilusión deberían ser la guía de nuestros recuerdos, no los malos momentos que nos hacen estar dando vueltas en la cama, con una canción triste en los cascos y sin poder hacer nada para remediarlo.
Creo que casi nadie consigue entender el poder de una sonrisa, en llegar un día temprano ver a alguien importante para ti y dedicarle la muestra física de felicidad, sólo por saber que está ahí en ese momento, por nada en especial y por todo a la vez. Desde mi punto de vista es algo que no debe olvidarse.
Hay personas que de repente te dan un segundo de ilusión, que quizás vale mucho y no nos damos cuenta, o no queremos darnos cuenta, por miedo casi siempre o quizás por habernos renegado a "que más da, si va a acabar mal igual", el pensar así debería ser tabú, el no querer arriesgarte a vivir, a intentar sacar tu alma a flote a golpe de optimismo, la lucha constante que nunca ganaremos como guerra pero hay veces que, una sola batalla es suficiente en nuestra vida para que nos parezca que el enfrentamiento ha acabado, y la paz ha llegado, y entonces ¿por qué no sonreir?

"Siempre pensé que era el único, mi cabeza vivió demasiado tiempo pensando en papeles y poca en la esperanza de que hubiese otra que también pensase en papeles, en sueños, en música y en sonreír... a veces es demasiado para nosotros el simple hecho de seguir hacia delante, pero incluso los fuertes aparentan ser fuertes y lo mejor de todo, que aparentando ser fuertes puedes animar a una persona de tal manera que te contagie de su ilusión, y acabes con una sonrisa, aún en un día lluvioso con la canción más triste del mundo."

martes, 6 de enero de 2015

Arrepentirse

Mi forma de pensar es algo rara quizás, después de ya no se cuantos años aprendiendo a vivir me doy cuenta de que apenas hay cosas por las que me arrepiento, y las cosas que me acabo arrepentido de corazón,  por ahora,  me han perseguido mucho tiempo, pero estoy contento, en ese aspecto de mi vida, a pesar de arrepentirme, no puedo negar una sonrisa al mundo, porque casi siempre en esas situaciones he podido recuperar algo del montón que había perdido, y no se si será por esfuerzos míos, suerte, esfuerzos de otras personas o a saber.
Puedo decir que estoy contento simplemente porque lo estoy, hay razones en mi vida bastante contundentes por las que podría no estarlo, pero me detengo a pensar y en este último año he descubierto. de mi tantísimas cosas que puedo intentar encontrar mi pequeña silueta de felicidad, y quedarme tranquilo en mi caverna observando sombras, porque aunque se que hay un sol fuera pero sé que está demasiado lejos como para intentar acercarme al calor que emite...

Aún sin mucho sentido sobre el tema que estoy hablando, quisiera decir que jamás hay que ser cuadriculado, no hay que pensar la vida como si fuera mecánica simplemente hay que vivirla, y creer en lo increíble, en las fantasías y las leyendas de Lunas Rojas. Yo soy bastante cuadriculado, pero me encanta fantasear con el mundo que me rodea, y aunque pueda tener todo una razón más lógica, me gustan más mis sueños que esa lógica, eso es algo que aprendí hace ya unos 3 años y medio y ha sido una de las mejores cosas que aprendí, aunque fue un poco a base de palos.